Guía para encontrar tu Ikigai siendo queer en un mundo que no siempre entiende
¿Y si tu propósito no tuviera que parecerse al de nadie más? ¿Y si encontrar tu lugar en el mundo no fuera un destino, sino un proceso lleno de verdad, heridas y belleza?
“El motivo por el que sigo aquí” es una guía emocional y luminosa para personas queer que buscan su razón de ser sin moldes, sin culpa y sin tener que justificar cada paso. Inspirado en el concepto japonés de ikigai —ese motivo íntimo que da sentido a tu vida— este libro lo reinterpreta desde una mirada diversa, interseccional y profundamente honesta.
Porque no siempre es fácil encontrar tu ikigai cuando has crecido sintiéndote diferente. Cuando el mundo te ha hecho pensar que tu identidad es un problema. Cuando has tenido que defender tu existencia antes siquiera de preguntarte qué te hace feliz.
A lo largo de siete capítulos, Javier Kiniro te acompaña a:
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Explorar tu historia sin miedo ni vergüenza.
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Identificar qué te mueve, qué te detiene y qué te atraviesa.
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Romper con ideas tóxicas sobre éxito, productividad o felicidad.
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Reescribir tu narrativa desde el deseo, no desde la adaptación.
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Y sobre todo, a habitarte con calma y orgullo.
Este libro no es una fórmula. Es una brújula. No te dice quién eres, pero te ayuda a acercarte. Con reflexiones, preguntas clave y frases que invitan a la pausa, “El motivo por el que sigo aquí” se convierte en un espacio de reencuentro contigo. No necesitas estar bien para leerlo. Solo necesitas estar.
Es ideal para personas en proceso de cambio, para quienes buscan sentido más allá del ruido, o para quienes han sentido que su existencia es demasiadas veces una explicación. También es un regalo precioso para acompañar a alguien que se está reconstruyendo.
La escritura de Javier Kiniro es directa, cálida y sin pretensiones. Habla desde la herida, pero también desde la esperanza. Y este libro es eso: una declaración íntima de resistencia y deseo.
Seguir aquí no siempre ha sido fácil.
Pero ahora puedes preguntarte por qué.
Y escribir la respuesta con tu propia voz.
