Guía queer para habitarte sin miedo
¿Y si no tuvieras que esconderte nunca más? ¿Y si pudieras vivir tu identidad con la calma de saber que no hay nada que sanar en ti?
“Ser yo” es una guía escrita desde el corazón de la experiencia queer. No pretende encajar en lo normativo ni ofrecer fórmulas universales. Al contrario: celebra la diferencia, la diversidad y la belleza de existir tal como eres, incluso cuando el mundo insiste en lo contrario.
Este libro no busca cambiarte, sino acompañarte en el proceso de ser tú, con todo lo que eso implica: dudas, miedos, heridas, deseo, fuerza, contradicciones. Aquí hay palabras que reconfortan, pero también preguntas que incomodan (porque crecer duele). Hay herramientas prácticas, sí, pero también hay poesía en cada frase. Porque vivir siendo queer es una revolución emocional.
Cada capítulo de esta guía es un espacio de exploración. Desde cómo sanar la vergüenza y el rechazo internalizado, hasta cómo construir tu propia familia elegida, cuidar tu salud mental o defender tu pluma sin pedir permiso. Todo está atravesado por una mirada amorosa, interseccional y profundamente humana.
No es un manual clínico ni un panfleto ideológico. Es una guía vivencial, política y afectiva. Pensada para adolescentes queer que buscan referentes, para personas adultas que aún están soltando la culpa, para aliades que quieren comprender mejor, y para cualquiera que se haya sentido fuera de lugar alguna vez.
Entre sus páginas encontrarás:
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Claves para entender la construcción del miedo identitario.
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Reflexiones sobre cuerpo, deseo, expresión y límites.
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Prácticas para reconectar contigo desde el autocuidado radical.
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Ideas para sanar desde el orgullo y no desde la culpa.
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Un enfoque directo, cálido y valiente que no infantiliza ni romantiza.
Este libro no tiene la pretensión de representar a todas las personas queer. Pero sí tiene el deseo profundo de que te veas en él, aunque sea en una línea, en una emoción, en una grieta. Porque la visibilidad no siempre se trata de ser visto en redes o en pancartas, sino de poder reconocerte en el silencio sin miedo.
“Ser yo” es, sobre todo, una declaración de existencia. Un refugio para los días difíciles y un impulso para los días valientes. Es un recordatorio de que ser tú no solo es suficiente: es poderoso.
